LA
DANZA EXPRESIONISTA
Por Ana Laura Caruso
´´Cada
obra de arte proviene de una necesidad interna del alma. La
verdadera obra de arte nace del artista: una misteriosa,
enigmática y mística creación. Se separa de él, adquiere
vida propia, se transforma en una personalidad en sí misma;
un sujeto independiente animado por un viento espiritual, el
vivo fundamento de una verdadera existencia humana.´´
Wassily
Kandinsky (1866-1944)
Introducción:
A
lo largo de las siguientes líneas investigaremos de qué
forma se manifestó el expresionismo alemán en el terreno de
la danza. Como es bien sabido, las distintas esferas del arte
no deben considerarse autónomas sino que están profundamente
relacionadas entre sí. La idea principal de esta exposición
es brindar un panorama general del expresionismo en Alemania,
profundizando en el espacio de la danza y así poder comparar
el baile y la pintura expresionistas. A su vez, es mi deseo
destacar la importancia que tuvo este movimiento en la
historia de la danza, ya que generó una ruptura que marcó el
comienzo de una nueva época.
Desarrollo:
El
nacimiento de las vanguardias en Alemania:
A
comienzos del siglo XX se manifestaba en toda Europa un clima
de entusiasmo e interés por los avances técnicos, los logros
de la ciencia y la creencia en el progreso. Existía una
confianza generalizada que animó la creación y los
descubrimientos de toda índole: desde la teoría de la
relatividad de Einstein hasta las teorías freudianas sobre el
inconsciente y la interpretación de los sueños. A su vez, la
aviación, el automovilismo y la radio cobraron un fuerte
impulso en este período.
Sin
embargo, en esta atmósfera de aceleración comenzaron a
surgir artistas que revelaron la fragilidad del individuo y su
pequeñez en un mundo sin Dios, un universo en el cual el
hombre se hallaba desamparado. Ya Nietzsche había anunciado
la muerte de Dios y así también pensaron las vanguardias al
mundo del arte clásico. Este último había caducado, por lo
tanto había que crear una nueva forma de experimentar el
arte. Es precisamente a raíz de esta idea que surgieron las
vanguardias. Las vanguardias pensaron un arte que conllevase a
la liberación de los instintos, la reflexión sobre el tiempo
presente y la ruptura con las formas clásicas de pensar lo
artístico y lo estético. En el clima de aceleramiento de la
época, las vanguardias mostraron lo decadente de la sociedad,
el contraste entre las clases sociales, el mundo de la miseria
y los prostíbulos, entre otras cosas.
El
expresionismo:
El
movimiento expresionista se desarrolló principalmente en
Alemania y se caracterizó por revelar un grito de horror, de
desesperación, por el clima que genera la guerra y la
repulsión hacia ciertos aspectos del tiempo vivido. Esta
corriente busca exaltar los sentimientos del artista que
surgen desde su interioridad. El creador se convierte de este
modo en un medio entre su interior y el mundo que lo rodea.
Él será el encargado de manifestar en su obra aquello que
proviene de lo más profundo de su alma: "El artista no
puede hacer más [...] que recoger lo que le llega desde las
profundidades y transmitirlo más lejos. Por consiguiente, no
sirve ni manda, sólo actúa como mediador".
Dentro
del expresionismo alemán existieron dos grandes grupos de
artistas: El Puente (Die Brucke) y El Jinete Azul
(Blazer Reiter). El primero surgió en 1905, se disolvió
en 1913 y fue conformado por artistas como Kirchner, Bleye,
Heckel y Nolde. Este grupo fue el que transmitió sus ideas de
formas más violenta. Trabajaron con figuras marginales como
los obreros, las prostitutas, el hombre solo en la gran ciudad…
Frente a la belleza del arte burgués apareció lo grotesco,
lo feo.
El
segundo grupo, El Jinete Azul, estuvo integrado por
artistas como Kandinsky, Klee y Marc. El grupo se formó en
1911 y se dedicó a trabajar desde una postura más
espiritual. En este caso, se deja de lado la forma para
concentrarse en la esencia, en la vida interior del hombre y
lo esotérico.
Rudolf
Laban y los comienzos de la danza expresionista:
Así
como en el campo de la pintura existieron rupturas importantes
en torno al arte clásico, lo mismo sucedió en el terreno de
la danza. En el contexto ya descripto de Alemania a principios
de siglo, surge una reacción contra la amenaza de la máquina
y la creciente industrialización. Por lo tanto, se reivindica
el cuerpo libre, el retorno a la naturaleza y a lo saludable.
Junto con las teorías de Freud y Jung sobre el inconsciente
se busca también en la danza liberar al hombre de sus
represiones. Es entonces cuando Rudolf Laban, nacido en el
Imperio Austro- Húngaro (1879 – 1958) crea un sistema que
permite la exploración y el análisis del movimiento, que
incluye el estudio del espacio en relación al cuerpo. De esta
forma, se pone especial atención a la energía emanada por
los cuerpos más que atenerse a los rígidos movimientos del
ballet clásico. Laban, en definitiva, busca la integración
entre el cuerpo y el alma. Pero para romper con los
movimientos del bailarín tradicional, crea un sistema que
permite registrar gráficamente el movimiento.
Entre
los aportes de Laban podemos destacar que este
coreógrafo dejó sentadas las bases para la creación de una
nueva danza. Laban le devolvió al espacio su profundidad,
permitiendo que el movimiento de los bailarines se realizara
en direcciones múltiples. De esta forma, el espacio no es
más algo rígido sino que ahora acompaña los movimientos del
bailarín. A su vez, el ritmo ya no se ve limitado por la
métrica y la música. Justamente, se rompe con la concepción
clásica de la coreografía esclava del ritmo. Se aprende a
valorar el silencio como acompañamiento de la danza y, a
diferencia del ballet clásico, se busca escapar de la fuerza
de gravedad mediante la pérdida del equilibrio. En lugar de
las poses del ballet clásico, Laban impulsó el movimiento
dinámico, natural, que permite al bailarín la auto descarga
rítmico-espacial. Utilizando los ideales del antiguo arte
griego, se inspiró en las formas más naturales de la danza y
se basó en una notación geométrica que enseñaba como, al
estirarse o agacharse, el cuerpo se ajustaba en un espacio.
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Rudolf Laban |
Las
ideas de Laban son parecidas a las de El Jinete Azul,
ya que en ambos hay un intento de captar la esencia
espiritual de la realidad. Además, en ambos movimientos hay
un rechazo a lo que el mundo tiene para ofrecer: la sed de
poder, el avance de las máquinas y el clima de guerra. Tanto
el expresionismo en danza como en pintura aceptan el lado
oscuro del hombre. El ser humano ya no es bello y estilizado.
Con respecto a este punto, es importante destacar algunos
elementos típicos de la danza expresionista como la
preferencia por movimientos abruptos, en donde el ser humano
parece quebrarse por su fragilidad y su desamparo, el cuerpo
contraído a raíz del sufrimiento (a diferencia del pecho
erguido del bailarín clásico) y, finalmente, el abandono de
los zapatos en punta que usan los bailarines clásicos. La
danza debe sentirse con todo el cuerpo, por eso es que los
bailarines expresionistas prefieren bailar descalzos, para
estar en contacto con la naturaleza.
Diferencias
entre el ballet y la danza moderna
Ballet
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Danza
Moderna
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Las
formas siempre son graciosas y bellas.
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Las
formas muestran lo bonito y lo feo de la vida
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El
cuerpo necesita tener una forma en particular y desde
niños se trabaja en eso.
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El
cuerpo puede pesar o medir lo que sea mientras este
fuerte y flexible.
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Se
trabaja movimientos elevados y saltos.
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Se
trabaja en el suelo y en saltos con caídas.
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Los
pasos básicos están rígidamente definidos
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Hay
muchos estilos de pasos
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La
coreografía sigue una historia y tiene varios
personajes.
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La
coreografía se basa en ideas y sentimientos.
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Se
baila con ropas y zapatos en punta.
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Se
baila con cualquier tipo de ropa y con los pies
descalzos.
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El
hombre carga a la mujer en formas definidas.
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Uno
o más hombres cargan a la mujer o a otros hombres de
maneras inusitadas. Inclusive la mujer carga al hombre.
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La
abstracción en la danza expresionista:
La
danza expresionista es también llamada danza abstracta, ya
que opera con un movimiento para crear un estado de ánimo o
transmitir una idea. Este movimiento se aleja en distintos
grados de lo naturalista o literal, pero el instrumento de
ejecución
es
siempre el cuerpo humano y es por ello que la abstracción
nunca se puede lograr por completo. Es decir, es difícil
reducir el cuerpo a una abstracción de línea y forma como
sucede en la pintura.
Según
Kandinsky, el arte debe ir desde "la traba pesada y
humillante de la realidad material hasta la libertad abstracta
de la visión pura". Justamente, este artista afirma que
mientras más espantoso se vuelve el mundo, más abstracto se
vuelve el arte, mientras que un mundo feliz crea un arte
realista (C.R).
El
máximo exponente de la danza expresionista: Mary Wigman
Mary
Wigman (1886 – 1973) nació en Hannover y comenzó a
estudiar danza a los 20 años, una edad considerada tardía
para el aprendizaje profesional de la danza. Estudió con
Rudolf Laban e indagó en las investigaciones de Francoise
Delsarte (un pedagogo francés del siglo XX) sobre el gesto y
el movimiento. Wigman conoció varios pintores del grupo El
Puente, quienes utilizaban bailarines como modelos y
estaban influenciados por el fauvinismo, el arte negro y las
pinturas de Munch. Justamente, fue su amigo Emil Nolde quien
la convenció de que fuera a conocer a Rudolf Laban, quien
tenía el mismo interés que ella en crear una nueva forma de
expresión artística en la danza.
Rudolf
Laban se encontraba en ese momento dando clases en el Monte
Veritá, en Suiza. Éste era un centro
intelectual situado al lado del lago ´´Maggiore´´ (entre
medio del territorio Suizo e Italiano) por el cual pasaron
Tristan Tzara, Hugo Ball, Paul Klee, James Joyce, Karl Jüng,
y Hermann Hesse. Este lugar era la vía de escape para
aquellos intelectuales que, descontentos con la vida de la
metrópolis, anhelaban retornar a las formas más arcaicas de
vida.
Sin
embargo, con el estallido de la I Guerra Mundial Mary Wigman
se mudó a Zurich, donde compartió cuarteles en una escuela
con los dadaístas. Dadá, al igual que Wigman y Laban,
rechazaba la guerra y buscaba una escritura creativa. Dadá,
aunque de forma diferente al expresionismo, también fue un
grito de protesta:
Dadá
está contra la belleza eterna
Dadá es antiartístico, antiliterario y antipoético
Dadá
está contra la eternidad de los principios
contra la inmovilidad del pensamiento
contra la pureza de los conceptos abstractos
contra las leyes de la lógica
Laban
y sus bailarines se vieron íntimamente relacionados con los
dadaístas. Los bailarines tomaron parte en varias actividades
organizadas por esta vanguardia, por ejemplo, recitando poemas
dadaístas en el Cabaret Voltaire. En el verano, los
dadaístas iban al Monte Veritá, donde se organizaban
festivales y distintas actuaciones.
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El grupo
dadaísta fotografiado en París, 1920. Entre otros, se
encuentran Paul Eluard, Tristan Tzara, Philippe Soupault
y Benjamín Peret. |
Volviendo
a la concepción de la danza de Mary Wigman, podemos
destacar que ella creía que la danza sólo es significativa
en cuanto constituye una expresión de la vida interior del
bailarín, algo similar a lo que afirmaba Kandinsky cuando
hablaba del pintor y su obra. Wigman fue quien más énfasis
puso en el predominio de la expresión como opuesta a la
forma. Para ello, utilizó máscaras para destacar la
expresión del rostro y se focalizó en la improvisación y el
uso de los gestos durante el baile. Probó nuevos movimientos,
arrastrándose, deslizándose, o simplemente sentándose y
moviendo el torso, como se hacer a los bailarines orientales.
Ella afirmó que "cada persona creadora lleva en sí su
propio tema característico. Está esperando surgir a través
de la experiencia y completarse durante un ciclo creador
completo en radiaciones, variaciones y transformaciones
múltiples." Wigman fue una de las primeras en crear
coreografías enteras sin música. Su técnica se basó en un
principio de relajación – tensión para obtener dinamismo
en el baile. De esta forma, el alma del ser humano, su
conexión con el infinito y su sentido de transformación se
transmitían en el baile.
A
su vez, otro de los logros de Wigman fue dejar de considerar
al espacio como una cárcel en la cual el bailarín estaba
atrapado. El espacio pasó entonces a acompañar al bailarín
sin reprimir ninguna posibilidad de movimiento del cuerpo. Es
importante recalcar que los movimientos naturales estipulados
por Wigman nacen, de todas formas, de los movimientos
clásicos del ballet. Es decir, es perfectamente compatible
que la técnica sea revolucionaria pero a la vez continúe una
tradición y creencias establecidas. Por otro lado, la
influencia de la danza griega, hindú y africana en Wigman es
notoria. También es significativa la aspiración romántica
de los bailarines expresionistas de fundirse con su arte, de
ser uno con el universo: "Al interpretar mis propias
composiciones de danza, surge en mí, en el momento de
ejecución, el deseo apasionado de convertirme en una unidad
con estas danzas, de desaparecer en ellas, de vivirlas".
Esta
tendencia a la unidad y la subjetividad se veía en los
artistas románticos, como Novalis y Holderin, quienes
también buscaban hacer surgir en lo más profundo de su ser
un sentimiento, buscaban inspiración en su propia
interioridad. Los temas de las obras de Wigman son: la locura,
el salvajismo sexual y primario, el espanto, la mueca, la
agitación de la metrópoli, la muerte…
El
fin de la guerra: la disolución de las vanguardias
La
guerra dejó heridas profundas en el pueblo alemán. Todo lo
que estaba relacionado con lo espiritual había quedado
destruido y sin esperanza por los horrores de la guerra. Los
cuadros expresionistas se volvieron más violentos, como los
soldados mutilados del pintor Otto Dix. También la danza
tomó un nuevo rumbo. Por primera vez en la historia, la
historia una danza de vanguardia fue aceptada en el circuito
oficial y proclamada con mucho éxito por las masas. Así fue
como la danza moderna viajó por el mundo.
Mientras
tanto, en la metrópolis, los alemanes buscan en el arte el
consuelo ante las heridas que dejó la guerra. En Berlín se
abren nuevos teatros y cabarets. A su vez, nace el arte
industrial con la Bauhaus (1920s). Muchos expresionistas como
Klee y Kandinsky trabajaron en la Bauhaus. Esta escuela fue
fundada por Gropius con el fin de brindar conocimiento
teórico y práctico del arte aplicado en la industria.
Pero
el progreso tecnológico no fue capaz de evitar la crisis
económica que estalló en Alemania, agravada por las duras
medidas contra este país, impuestas en el Tratado de
Versalles al finalizar la guerra. Así tuvo lugar el
surgimiento del partido nacional-socialista y la asunción de
Hitler al poder en 1933.
Wigman,
al revés de muchos artistas, decidió no exiliarse y se
quedó en Alemania. Sin embargo, al negarse a colaborar con el
régimen, no pudo dar rienda suelta a sus ideas y dio su
última actuación en 1942.
La
innovación no muere: Pina Bausch y la danza contemporánea
alemana
El
nazismo hizo que muchos artistas alemanes emigraran. Laban y
Jooss, otro coreógrafo alemán, fueron bienvenidos en
Inglaterra. Kurt Jooss había criticado duramente a la
sociedad alemana en sus coreografías, incluyendo entre sus
personajes figuras como la de la muchacha que debe vender su
cuerpo por dinero, la madre desesperada, el soldado humillado,
el hombre hambriento de poder…Su obra más crítica fue La
Mesa Verde (arriba, izquierda), en donde destacaba la grieta existente entre
las distintas clases sociales.
Pina
Bausch,
nacida en 1940, es quien revive el espíritu de la danza
alemana al crear el teatro-danza. Esta bailarina trabaja con
sus propios miedos, sus deseos y complejos, su vulnerabilidad.
Esto la lleva a emplear muchos gestos en sus coreografías y
la exteriorización de lo interno, tal como hacían los
expresionistas. Sus obras están llenas de crueldad e ironía
pero a la vez cargadas de sentimientos humanos como por
ejemplo qué hacemos para ser queridos, el cual es un
tema recurrente en sus obras. Bausch deja de lado las
diferencias entre los hombres para mostrar aquellos
sentimientos comunes a todos los seres humanos. En definitiva,
un análisis sobre Bausch merecería otro trabajo, por lo
tanto dejo abierta la posibilidad de que sigan investigando
aquellos a quienes les interese el tema.
Conclusión:
¿Cuál
es el legado de las vanguardias hoy? ¿Fue en vano su grito de
protesta? En mi opinión, la breve irrupción de las
vanguardias en el arte dejó una marca profunda en la historia
y una posibilidad abierta a la reflexión. Creo que la
innovación todavía es posible en este mundo
"posmoderno", como suelen llamarlo, donde todas las
creencias, las utopías, los ídolos y los dioses han muerto.
Un mundo en el que a los jóvenes "no nos queda nada y no
creemos en nadie". En lo personal no pienso que esto sea
así. El entusiasmo hacia la vida es una actitud y no que una
cualidad innata. No creo en aquellos discursos que pretenden
convencernos de que no tiene sentido luchar por algo, y que
debemos cruzarnos de brazos esperando el Apocalipsis.
Los
artistas expresionistas han dejado su legado en mi experiencia
al mostrar otras realidades posibles. Al contrario de lo que
muchos opinan, no creo que las vanguardias artísticas hayan
sido una forma de evasión de la realidad. Muy por el
contrario, dejaron su huella a través del tiempo y aún hoy,
después de casi un siglo de su comienzo, siguen dando de qué
hablar. Nunca hubiera hecho este trabajo si no creyera en el
poder de transformación del arte en cualquiera de sus formas.
Tanto
en pintura como en danza, el expresionismo demostró ser capaz
de comunicar ideas y sentimientos nacidos de lo más profundo
del ser, que no podrían haber sido manifestados de otra
forma. Si estos artistas se hubieran atenido a las rígidas
concepciones del arte clásico, nunca hubieran logrado
transmitir las impresiones propias de su época. El arte, así
como la sociedad y los valores, se transforma y debe renovarse
continuamente. Y por más que las vanguardias no sean hoy lo
que fueron en su momento, y en la actualidad encontremos
piezas de pintores expresionistas en un museo privado, su
mensaje está allí para el que anhela descubrirlo. Es nuestra
labor hacer circular la voz de que sí existen otros mundos
posibles, de que somos sólo un pequeño granito de arena en
la inmensidad del universo y que es viable exponer nuestros
sentimientos por medio del arte.
...El arte juega con las emociones de las personas y, como decía
Aristóteles, el espectador experimenta un sentimiento
profundo al contemplar una pieza de arte: una catarsis, una
descarga de emociones que varía en intensidad según quién
la presencie. En fin, el arte no se entiende racionalmente
sino que se vive; no es una forma de entender al mundo sino
que conforma una manera de sentirlo y de vivir las
experiencias intensamente. (*)
(*)
Fuente:
Ana Laura Caruso, "La danza expresionista",
texto escrito en el contexto de la materia Principales
corrientes del pensamiento contemporáneo de la Carrera de
Ciencias de la Comunicación de la Universidad de Buenos
Aires, en 2005.
Notas
-
http://painting.about.com/library/biographies/blartistquoteskandinsky.htm
-
(Traducción
hecha por Ana Laura Caruso)
-
Klee,
Paul en De Micheli, Mario: Las vanguardias artísticas
del siglo XX, Córdoba, Editorial Universitaria de
Córdoba, 1985 (página 102).
-
Extraído
de una clase de Historia Sociocultural del Arte
en el I.U.N.A de la carrera Licenciatura en Composición
con mención en Danza- Teatro, año 2004.
-
De
MIchelli, Mario, Las vanguardias artísticas del siglo
XX, op.cit, página 97
-
Ibid,
p. 98.
-
http://es.geocities.com/dada1391/dadaismo.htm
-
Love,
Paul: Terminología de la danza moderna, Buenos Aires,
EUDEBA, 1964, página 26.
-
Ibid,
página 34.
|